El TTIP se trata de una
propuesta de Tratado de libre comercio entre EE. UU y la UE. A pesar de ello,
el Tratado Trasatlántico de Libre Comercio, TTIP (Transtlantic Trade and
Investment Partnership), lleva en el ojo del huracán de la UE desde hace tres
años (en el momento de esta noticia, cinco actualmente). Se trata de un acuerdo
que no termina de cuajar y que sin duda está marcado por las numerosas críticas
y la falta de transparencia. Ya en el año 2016, auguraba que no llegaría a buen
puerto, y si bien es cierto, ha estado estancado durante años.
Este proyecto, comienza a
fraguarse a finales de 2011 a raiz de los estudios de un grupo de lideres
americanos que estudiaban la posibilidad de incrementar el comercio y la
inversión entre EE. UU. y la UE. Estas negociaciones se demoraron hasta 2013,
pero el nivel de secretismo fue tal, que no llegó a prensa hasta un año
después.
Como para todo, hay defensores
y detractores de la idea, mostrandose estos últimos muy críticos.
Por un lado, sus defensores
dicen que dinamizará los intercambios transatlánticos entre dos grandes zonas y
que además facilitará y simplificará la vida de las empresas reduciendo las
tarifas aduaneras y los trámites relativos a burocracia.
Por el contrario, sus
detractores, se han reunido en torno a la plataforma "Stop TTIP",
pues sostienen que la legislación afectará a los derechos de la ciudadanía y el
medio ambiente. Pero sin duda, el punto más polémico es el que se refiere a la
resolución de conflictos jurídicos entre empresas y estados a través de
tribunales de carácter privado, buscando así la mayor seguridad jurídica para
las empresas a lo cual se opone la Comisión.
El estado actual de la
negociación del TTIP parecía haber sido enterrado definitivamente con la
elección de Trump como presidente de EE. UU., sin embargo, debemos estar
especialmente atentos debido a las posibles pequeñas concesiones reglamentarias
por parte de la Comisión. De este modo, no nos equivocaríamos si lo tildásemos
este acuerdo como un "TTIP-light", ya que se harían realidad algunas
disposiciones que incorporaba el propio TTIP. De todos modos, no está de más
recalcar el carácter secreto de estas negociaciones, por lo que no sería de
extrañar que nuevas noticias viesen la luz en los próximos meses y que no
deberían cogernos por sorpresa.
Fuentes: https://www.elmundo.es/economia/2016/04/28/57192212e5fdea64518b4682.html
https://www.eldiario.es/euroblog/muerto-realmente-TTIP_6_818278205.html
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